Si hay algo más grande que un éxito de taquilla, es el arrepentimiento retrospectivo de un actor que lo dejó pasar. Hollywood está lleno de “pude haber sido yo” que flotan como globos desinflados por decisiones precipitadas, agendas apretadas o simples ataques de ego. En las próximas líneas repasamos algunos casos deliciosamente trágicos de oportunidades perdidas: desde héroes de ciencia ficción hasta agentes secretos que se fueron por el desagüe de las dudas. Y sí, algunos de estos rechazos dejaron escapar películas que recaudaron más de 1.000 millones de dólares, así que la ironía está servida.
Will Smith – ‘The Matrix’

Will Smith rechazó interpretar a Neo porque la explicación de los Wachowski le pareció demasiado abstracta, ironías del destino. Más tarde admitió que vio a Keanu Reeves triunfar mientras él pensaba en aquel “qué hubiera pasado si…”. Costaba ignorarlo: la película ingresó más de 460 millones de dólares, una cifra que hace sudar a cualquiera.
Emily Blunt – ‘Iron Man 2’

Emily Blunt estuvo a centímetros de interpretar a Viuda negra, pero un contrato previo la encadenó a otra película. Scarlett Johansson tomó el relevo y construyó uno de los personajes más icónicos del MCU, una franquicia que ha generado más de 29.000 millones de dólares. Blunt lo mira con cariño… y quizás con una ceja levantada.
Tom Selleck – ‘En busca del arca perdida’ (‘Raiders of the Lost Ark’)

Selleck no pudo ser Indy porque estaba atado a una serie televisiva. Harrison Ford heredó látigo, sombrero y gloria eterna. La saga terminó generando más de 1.000 millones de dólares: suficiente para comprar muchas camisas hawaianas.
Gwyneth Paltrow – ‘Titanic’

Paltrow pasó del papel de Rose y Kate Winslet saltó al barco (literalmente). La película terminó convirtiéndose en un fenómeno mundial con más de 2.200 millones recaudados. No es que Paltrow lo lamente… pero el cheque habría estado bien.
Matt Damon – ‘Avatar’

James Cameron le ofreció no solo el papel protagonista, sino también un porcentaje de taquilla. Damon declinó porque estaba demasiado ocupado. La película terminó ganando alrededor de 2.900 millones de dólares. Sí, este rechazo duele incluso leerlo.
Michelle Pfeiffer – ‘El silencio de los corderos’ (‘Silence of the Lambs’)

Pfeiffer vio el guion y pensó que era “demasiado oscuro”. El papel fue para Jodie Foster, que se llevó un Oscar bajo el brazo. Y la película es ahora un clásico: algo que no asusta… bueno, un poco sí.
Denzel Washington – ‘Se7en’

La historia le pareció demasiado macabra, así que declinó. Brad Pitt la aceptó y se consagró mundialmente Denzel admitió después que la película le pareció genial cuando la vio. Ay.
John Travolta – ‘Forrest Gump’

Travolta no creyó que el proyecto funcionara. Tom Hanks demostró lo contrario y ganó el Oscar. Travolta dijo que no se arrepentía… aunque nadie le creyó mucho.
Julia Roberts – ‘Shakespeare in Love’

Roberts no encontró al actor adecuado para su Romeo y el proyecto se derrumbó para ella. Gwyneth Paltrow tomó el papel y ganó un Oscar. El drama real estaba detrás de cámaras.
Hugh Jackman – ‘James Bond’

Jackman temía encasillarse en papeles de acción y dijo que no. Daniel Craig tomó el Martini y redefinió la franquicia hasta recaudar más de 3.000 millones de dólares. Lobezno se quedó sin esmoquin.
Leonardo DiCaprio – ‘American Psycho’

No quería que su imagen juvenil se mezclara con un psicópata con tarjeta dorada. Christian Bale se quedó con el personaje y elevó la película a culto absoluto. DiCaprio, mientras tanto, siguió sobreviviendo a icebergs imaginarios.
Charlize Theron – ‘Chicago’

Theron fue descartada porque buscaban otro tono. Renée Zellweger ocupó su lugar y consiguió una nominación al Oscar. El musical bailó sin ella hacia el éxito.
Al Pacino – ‘Star Wars’

Pacino confesó que no entendía nada del guion. Harrison Ford, de nuevo, heredó el estrellato galáctico. Y el resto es historia… y merchandising infinito.
Sean Connery – ‘El señor de los anillos’ (‘The Lord of the Rings’)

Connery rechazó interpretar a Gandalf porque no entendía el material. Ian McKellen lo abrazó con gusto. La trilogía generó casi 3.000 millones de dólares y Connery se quedó sin capa ni bastón.
Bette Midler – ‘Sister Act’ (‘Sister Act: una monja de cuidado’)

Midler temía que su público no la quisiera ver de monja. Whoopi Goldberg tomó el hábito y el éxito. A veces conviene confiar en el vestuario.
Brad Pitt – ‘The Matrix’

Pitt también rechazó el papel de Neo, aunque admite que nunca iba a tomárselo demasiado en serio. Reeves sigue agradeciendo esos rechazos desde hace décadas.
Michael Keaton – ‘Atrapado en el tiempo’ (‘Groundhog Day’)

Keaton no entendía el tono del guion. Bill Murray lo entendió perfectamente y la película se volvió un clásico absoluto. El Día de la Marmota nunca termina… salvo para Keaton.
Anne Hathaway – ‘El lado bueno de las cosas’ (‘Silver Linings Playbook’)

Hathaway dejó el proyecto por diferencias creativas. Jennifer Lawrence tomó el papel y ganó un Oscar con 22 años. No es mal premio de consolación.
Russell Crowe – ‘Lobezno’ (‘Wolverine’)

Crowe consideró la película demasiado caricaturesca, así que recomendó a Hugh Jackman para el papel. El resto es historia peluda y taquillera. A veces la generosidad sale cara.
Joaquin Phoenix – ‘Doctor Strange’

Phoenix no quería compromisos contractuales largos. Benedict Cumberbatch sí, y ahora es uno de los pilares del MCU. Phoenix terminó ganando un Oscar con Joker, así que bueno… tampoco le salió tan mal, pero el universo Marvel sigue siendo un dulce apetitoso.